La agricultura protegida se caracteriza por tener una producción a base de herramientas como los invernaderos o malla sombra.
Según datos de la AMHPAC (la Asociación Mexicana de Horticultura Protegida A.C.), en 2010 se tenían 6 mil 328 hectáreas bajo este esquema y para 2016 se presentó un crecimiento de 43 por ciento, es decir; 9 mil 40 hectáreas. Estas cifras se dieron a conocer en la firma de convenio de colaboración para el intercambio de datos entre el Servicio de Información Agroalimentaria y Pesquera (SIAP) y la AMHPAC.
Respecto a producción 2016 se incrementó el volumen superando el millón 200 mil toneladas de hortalizas, según destacó el director general de la Asociación Alfredo Díaz. Además destacó que para la agricultura protegida es vital contar con la información necesaria para la planeación de los negocios eficiente, atendiendo a la respuesta del mercado, la programación, el presupuesto así como el seguimiento y evaluación de los resultados.
Una de las principales ventajas la agricultura protegida es incrementar la producción de alimentos en menos superficie, y gracias al fortalecimiento de la información será un proceso más fácil controlar.