La explotación ganadera convencional rechaza la ecología en el entendido de que la ganadería ecológica resulta más cara de mantener y es menos rentable.
Un estudio que compara los dos tipos de explotación ganadera, generada con el Centro de Investigación y Formación Agraria (CIFA) de España, constata que la segunda arroja mejores resultados, genera más empleo, ingresa más dinero y causa menor impacto ambiental. El estudio realizado en España, comprendió 22 granjas de producción ecológica y diez convencionales, cinco de pastoreo y cinco intensivas.
¿Qué es la ganadería ecológica?
Es un conjunto de técnicas ganaderas que excluye el uso de productos químicos con la finalidad de conservar el medio ambiente y proporcionar alimentos con todas sus propiedades naturales.
Entre las prácticas a respetar con este sistema se considera que las razas animales sean autóctonas, de cría en pureza o cruzamientos; lo que garantiza que sea más resistente y se adaptan mejor a las condiciones climáticas, irregularidades del terreno y mejor alimentación de los recursos vegetales de la tierra.
El equilibrio entre ganadería-naturaleza para evitar el deterioro del suelo y la vegetación provocados por el pastoreo se consigue adaptando la carga ganadera de tal forma que no sobrepase la cantidad de desechos que el suelo pueda soportar para evitar la contaminación por nitratos.
Un 60% de la alimentación se sustenta por el pastoreo, beneficiando el suelo con el aporte de estiércol. Siendo el propósito principal de la alimentación es asegurar una producción de calidad, cubriendo la nutrición del ganado. Además la base de salud y bienestar de los animales es importante prevenir que curar, es decir; mantener a los animales sanos y dispongan de los espacios óptimos a sus necesidades fisiológicas. La seguridad sanitaria se basa en la prevención y buen manejo de los recursos disponibles.
Para los casos de curación de los animales se usa la fitoterapia y homeopatía, no estando permitida la prevención de enfermedades mediante medicamentos convencionales quedando sólo disponibles en excepciones por campañas obligatorias o en la búsqueda del bienestar del animal sobre lo demás.
La cría ecológica de animales se asienta en el principio de fuerte vínculo entre los animales y el medio físico. Esta necesidad de vínculo con la tierra obliga a que los animales tengan acceso a zonas al aire libre y a que la alimentación sea ecológica, preferentemente producida en la propia explotación. Además se rige por disposiciones estrictas relativas al bienestar animal y al cuidado veterinario.
Beneficios de esta ganadería:
- Conserva el medio natural evitando contaminación.
- Respeta escrupulosamente el bienestar animal.
- Vigila la salud del ganado en vez de medicarlo.
- Mantiene las instalaciones confortables y limpias para no perjudicar al ganado.
- Cumple de las normas de certificación, incluso las superamos en varios aspectos.
- Obtiene productos finales de más calidad, sanos y libres de contaminación.
- Desarrolla el medio rural y potenciamos las variedades autóctonas.
- Fomenta el trabajo y la economía local en beneficio social.