Se llama Acocoxóchitl (Flor de Tubo Acuático), y es también conocida como Xicaxóchitl que significa flor de camote debido a que la planta se reproduce por camotes. Pocos saben que es mexicana, que en realidad no es una flor sino una inflorescencia (composición de dos tipos de flores pequeñas).
Las dalias fueron utilizadas en tiempos prehispánicos para adornar templos y casas durante los rituales; servían de inspiración para crear vasijas o elaborar collares; mucho antes de la llegada de los españoles a la Nueva España en 1571, cuando desembarcó en Veracruz. Estas flores fueron llevadas exitosamente a Europa a finales del siglo XVIII, vía España.
La dalia puede encontrarse en forma silvestre en casi todo el país. Los principales productores de esta flor son Morelos, Puebla, Estado de México, Michoacán y la Ciudad de México. Con su inigualable belleza y variedad de formas, tamaños y colores, desde el blanco puro hasta el rojo o morado más intenso, la Dalia es una flor de herencia prehispánica que cada año adorna los cerros de Xochimilco, sitio que se ha reconocido como la cuna de la Dalia, por cultivarla cada año desde tiempos inmemorables.
El género Dahlia está formado por 36 especies, todas nativas de México, de las cuales sólo cuatro constituyen la base genética de la dalia cultivada que hoy podemos admirar y que están en peligro de extinción debido a la pérdida de la diversidad en el cultivo de la horticultura y a la baja demanda en el mercado. De acuerdo al registro internacional de la Dalia, ubicado en Inglaterra, existen 50 mil variedades en todo el mundo. De todas sus variedades registradas, aproximadamente mil se pueden encontrar todavía en el país.
Gracias a su valor estético, ornamental y económico, en 1963 fue propuesta como “Flor Nacional” por instituciones de enseñanza, oficiales y particulares, como la Sociedad Botánica de México, por lo que el presidente Adolfo López Mateos así la decretó.
Entre otros usos de esta planta se encuentran los siguientes:
- Medicinal. La raíz es utilizada para combatir la tos crónica; es diaforética (sustancia que ayuda a controlar la temperatura), contra los cólicos, y para regular los niveles de glucosa en la sangre, entre otros; las hojas y la savia para los fuegos labiales; los bulbos hervidos son un buen diurético. El tubérculo contiene altos niveles de fibra que ayuda a mantener el sistema digestivo saludable, también mantiene el hambre a raya durante un tiempo más largo. Es ideal para los diabéticos gracias a que no precisa de la hormona insulina para su metabolismo, además los pigmentos de la flor tienen propiedades antioxidantes.
- Comestible. Se elaboran recetas apetitosas que tienen como base sus raíces y flores, algunos platillos son: "pollo con papas de dalia", “ceviche de pescado con tubérculos de dalias” y “aguacates rellenos de tubérculos y pétalos de dalias. Al igual que, agua, té, tacos y sopa.
- Forrajero. Al fomentar su cultivo contribuye a la ganadería mexicana.
- Otros usos: Es utilizada también como tinte de algodón
El material genético disponible es suficiente para producir flores de maceta, plantas arbustivas e incluso trepadoras que faciliten la flexibilidad a las creaciones ornamentales; por lo que es importante desarrollar trabajos de investigación relacionados a la propagación, cultivo y mejoramiento de la dalia, que permitan seleccionar flores con características factibles de modificar y de alto interés para el agricultor-productor, colaborando así al incremento de la pequeña empresa.