Conozcamos sobre las implicaciones de estos productos.
Hoy en día es común escuchar sobre los productos orgánicos para el consumo y cuya demanda crece de forma exponencial. Los mercados agrícolas ofrecen estos productos y los consumidores los buscan cada vez más frecuentemente.
La tendencia es resultado de lo que los expertos dicen sobre los productos orgánicos, que minimizan los riesgos para el medio ambiente y la conciencia generada sobre lo natural y del cuidado del medio ambiente; y que en conjunto pueden representar una oportunidad de agronegocio muy rentable.
Los productos orgánicos son considerados como “Productos Premium” puesto que además de ser vendidos a mayor precio, son cuidados en todo el proceso de cultivo, desde la semilla hasta su llegada a la mesa del consumidor.
De acuerdo a la FAO (Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura), a nivel mundial se destinan 30 millones de hectáreas para la producción orgánica. Destaca Australia con 12 millones de hectáreas, como el país con mayor superficie destinada a la producción orgánica; luego Europa con más de 7 millones y América Latina con casi 5 millones (Argentina, Brasil y Chile encabezan la producción y comercialización).
¿Qué significa el término “orgánico”?
Es un alimento agrícola o agroindustrial que se produce mediante un conjunto de procedimientos denominados ecológicos. Son productos vegetales, animales o sus derivados producidos y elaborados con sustancias naturales, en donde no se emplean plaguicidas ni fertilizantes de síntesis química; son libres de hormonas, antibióticos, residuos de metales pesados, colorantes y saborizantes artificiales u Organismos Genéticamente Modificados (OGM).
El Departamento de Agricultura de los Estados Unidos define orgánico como “un término de etiquetado que indica que el alimento o producto fue producido sin el uso de fertilizantes químicos, pesticidas u otros agentes artificiales”.
El producto para considerarse orgánico o ecológico debe cumplir con los siguientes requisitos:
-
No emplear productos de síntesis química en su producción.
-
Producir empleando métodos y técnicas para conservación el suelo y sus nutrientes.
-
Poseer una certificación vigente avalada por un organismo reconocido.
-
Uso racional de los recursos naturales.
La producción orgánica cuida la salud de las personas que las producen y de las que consumen, en esto radica la diferencia con la producción tradicional de alimentos.